viernes, 19 de noviembre de 2010

Alimentación para recuperar energía


Echa un vistazo a los alimentos y productos que te ayudarán a revitalizarte después de una extenuante jornada de trabajo.


No todos los alimentos aportan la misma cantidad de energía. Así, es posible encontrar algunos productos que benefician la digestión, otros que estimulan el sueño y otros que son ideales para la práctica de algún deporte.
Pero hay también algunos alimentos que te permitirán recuperar energías rápidamente, especiales para esos días en que llegas rendido del trabajo y lo único que anhelas es tu habitación.
Para que tu día no termine ahí, tan abruptamente, te contamos sobre algunos productos que te aportarán la energía necesaria para revitalizarte y, por qué no, salir a disfrutar de un grato momento tras la oficina.
Energía envasada para recuperar fuerzas
Bebidas, barritas y gelatinas energéticas entregan una gran cantidad de carbohidratos, proteínas, vitaminas, minerales y aminoácidos esenciales. Por lo mismo, son una ayuda indispensable para quienes practican exigentes deportes como el ciclismo, la escalada y las maratones.
Esta misma condición las hace muy efectivas para recuperar fuerzas tras un día laboral demasiado exigente y estresante. Tienen además la capacidad de disminuir la fatiga y aumentar el rendimiento tras un esfuerzo físico considerable.
Por ejemplo, las bebidas isotónicas aportan 300 calorías por litro con lo que revitalizan de manera rápida y efectiva. Sin embargo, se deben tomar con moderación, y en caso de personas que sufren hipertensión, diabetes o problemas cardíacos se debe descartar su uso.
Alimentos que te llenarán de energía
Otra alternativa es recurrir al chocolate negro y los frutos secos, alimentos que se destacan por su alto contenido energético y velocidad de acción. Agua, bicarbonato, el azúcar y el limón también son recomendables, sobre todo para una adecuada hidratación, necesaria para que el ánimo no decaiga. Si tu cansancio es total, puedes combinar los alimentos antes mencionados con este líquido. ¡Sentirás como tu cuerpo recupera las fuerzas!
Si deseas algo más contundente puedes optar por preparar arroz, pastas y derivados, que aportan una gran cantidad de carbohidratos, indispensables, para la energía en el ser humano, así como también puedes recurrir al pan, nueces, castañas y pasas de uvas. Mención especial merece el plátano, considerada la fruta de los sabios. ¿Te haz fijado que los tenistas suelen consumirlo? La explicación reside en su alto contenido de potasio, que previene los calambres, así como también por ser una fuente de energía que nuestro cuerpo asimila con facilidad. Los expertos recomiendan por lo menos uno al día y qué mejor que cuando tus fuerzas escaseen.
Recupera tu energía mental
Un agitado día de trabajo, no sólo desgasta el cuerpo, sino que también la mente. La capacidad física y mental del hombre son complementarias y por lo mismo si una falla la otra no rendirá a un nivel óptimo. Para que puedas fusionar a la perfección estas dos facultades también existen productos que facilitarán esta tarea: come alimentos integrales desde lentejas, nueces, hasta semillas de girasol y hortalizas frescas y evita los alimentos refinados, cocidos.
También toma cinco o más raciones de fruta y verduras cada día, eligiendo las de hoja y raíz, como berro, zanahorias, brócoli, coles de bruselas, espinacas, pimientos, crudos o ligeramente hervidos. Opta por las frutas frescas como manzanas, peras, bayas, melones o cítricos. De esta forma tus neuronas se revitalizarán.
Ya lo sabes... existe una dieta para que tu día sea mucho más que sólo una jornada de trabajo. Llévala a cabo.

10 alimentos que te ayudarán a ser feliz


Incluye en tu dieta estos alimentos que nos brindan sensación de bienestar al contener sustancias que actúan en los neurotransmisores.

Está demostrado científicamente que la serototina y las endorfinas son los neurotransmisores que generan sensaciones de felicidad, bienestar y sueño reparador. Además, actúan como analgésicos naturales.

El cuerpo produce estas sustancias por sí mismo; sin embargo, el proceso se ve estimulado por algunos nutrientes que se absorben de los alimentos que comemos, en vez de ser generados directamente por nuestro organismo.

El principal nutriente en este asunto es la proteína triptófano, un aminoácido vital para la producción de serotonina. El queso, el pescado, la carne magra, legumbres y nueces tienen alto contenido de ésta.

Otros componentes esenciales de los alimentos que ayudan en la “producción de la felicidad” son las vitaminas del complejo B; en especial la vitamina B6 y los carbohidratos.

Los alimentos clave
A continuación te presentamos un listado con los alimentos que no debes pasar por alto si buscas un nivel de serotonina y endorfinas óptimo; por ende, un estado de ánimo mucho más sano.

· El plátano: esta fruta contiene muchos nutrientes y fibras. Además, es rica en vitaminas, minerales y oligoelementos y proporciona al organismo un rápido aporte de energía. No está de más decir que aporta elevada cantidad de triptófano.

· Chocolate: comer diariamente pequeñas dosis de chocolate reduce las hormonas del estrés debido a los antioxidantes que posee, por eso, también nos hace sentir felicidad.

· Pescados y algas: integra las algas a tu dieta, pues tienen elevada cantidad de minerales, hierro, magnesio y vitaminas del complejo B. Tampoco dejes fuera el pescado, uno de los alimentos más ricos en vitamina B6 y en triptófano, especialmente el atún y el salmón.

· Carne: lo ideal es comerla tres veces a la semana. Una de las más recomendada es la de lomo de cerdo, pues tiene 10 veces más vitamina B1 que las otras carnes y la grasa se le desprende fácilmente. Cómela al horno o a la plancha.

· Legumbres: el ácido fólico de las hojas verdes y legumbres afecta los neurotransmisores que influyen de manera positiva en nuestro estado de ánimo.

· Pastas y cereales: alimentos ricos en hidratos, tales como harinas y derivados, cereales, arroz, pan, reducen la ansiedad y el riesgo de sufrir depresión. ¿Por qué? porque los hidratos de carbono aumentan la producción de serotonina.
· La piña: rica en minerales y vitaminas. También contiene compuestos activos que estimulan la producción de serotonina, generando vitalidad. Al mismo tiempo, otros de sus componentes calman la ansiedad y alivian la agitación nerviosa. Si la comes de noche crea el efecto de una pastilla natural, ya que el cerebro convierte el triptófano en melatonina, la hormona del sueño.
· El chile: “El gran efecto del pimiento” se conoce en biología al proceso en que el cerebro percibe el calor picante del chile como si fuera dolor y para contrarrestarlo responde liberando endorfinas que potencian las sensaciones de bienestar.
 
Cómo ejercitar el optimismo
El Lic. Luis Fernando Alcántara, miembro de la Sociedad Psicoanalítica de México te da algunos tips para tener una mejor actitud frente a la vida.


 

Últimamente resulta cada vez más aterrador leer el periódico o ver o escuchar algún noticiero. Entre la crisis económica, la explosión de violencia en todo el país y la nueva oleada de influenza, uno pierde con gran facilidad, toda esperanza de que las cosas puedan quizá mejorar. Además, es totalmente cierto que cada vez con mayor frecuencia encontramos signos y señales de estos problemas en nuestra vida cotidiana. Ya no se trata de problemas lejanos sino que sus efectos se empiezan a sentir de manera cada vez más cercana. Y si a esto le sumamos los problemas propios del mundo de hoy como la competencia laboral, el estrés o el tráfico por ejemplo, el optimismo parece una actitud ingenua o, en el mejor de los casos, una actitud poco realista y muy difícil de sostener. ¿Cuántas veces salimos un día por la mañana con la intención de ser optimistas y no pasan ni cinco minutos y ya hemos olvidado nuestro propósito?
Sin embargo, no es cierto que ésta es una actitud inútil. El optimismo es una de esas herramientas que, si la obtenemos y ejercitamos adecuadamente, nos sirve para todo y para siempre. El problema está entonces, en que no sabemos en qué consiste ser optimista y sobre todo, en que no sabemos cómo podemos serlo. Cuando hablamos de optimismo o de pesimismo, nos referimos a una actitud. Es, por decirlo de otro modo, una experiencia íntima: yo debo ser optimista, al menos en principio, independientemente de todo lo que me pase.
Por ejemplo, a dos compañeras de trabajo pueden ascenderlas de puesto en una empresa y una puede pensar que es una excelente oportunidad de crecimiento, además de obtener un mejor sueldo; mientras que otra puede creer que es un problema porque tendrá más trabajo y menos tiempo libre. En realidad, a las dos personas les pasó exactamente lo mismo y esto tiene, para las dos, las mismas consecuencias: es cierto que tendrán mayores oportunidades, ingreso y trabajo. Sin embargo, es radicalmente distinta la manera en que una y otra viven el mismo evento. Esto depende, entonces, de qué características enfatizamos en nuestras vidas, lo bueno o lo malo. Lo grave del asunto es que se nos olvida que las cosas son en realidad tal como las queramos ver.
Una de las cosas que más trabajo cuesta entender, inclusive a lo largo de un proceso psicoterapéutico, es que la “felicidad”, en todo caso, no es algo permanente. Es decir, es falso cuando alguien dice que lleva dos años feliz. Lo que sucede, más bien, es que vivimos en una realidad tan cambiante que nuestros estados de ánimo, buenos y malos, van y vienen todo el tiempo. Además, salvo algunas excepciones, siempre nos debería ser posible encontrarle el lado bueno a lo malo. Así, hay quienes viven la misma situación con gran felicidad y quien la vive con una enorme infelicidad.
¿De qué depende todo esto? En primer lugar, de nuestra personalidad. Ésta se constituye por las respuestas habituales que tenemos frente a los estímulos. Por lo tanto, podemos decir que hay personalidades más o menos propensas al optimismo. Esto quiere decir que algunos de nosotros tenemos una dificultad adicional para ser optimistas. Tenemos que comenzar por descubrir qué tipo de personas somos: si somos de los que  reconocen fácilmente lo bueno o si somos de los que nos cuesta un poco más de trabajo ver los rasgos positivos de las cosas.
Un buen ejemplo de esto son nuestras parejas. Cuántas veces nos enamoramos perdidamente de alguna persona y, con el paso del tiempo, nos desilusionamos tremendamente al descubrir algún defecto en quien creíamos que debía ser perfecto. Y lo mismo ocurre cuando, sólo con el tiempo, nos damos cuenta de que una relación que creíamos terrible no lo era tanto, y que, en el fondo, existen aspectos que sinceramente extrañamos. El problema reside, entonces, en que a todos nos cuesta trabajo reconocer que nuestras parejas, y nuestras vivencias en general, no son ni totalmente buenas ni totalmente malas. Sobre todo, nos parece difícil entender que lo que permite que una relación funcione es justamente esto: la presencia tanto de aspectos buenos como malos, tanto virtudes como defectos.
Una actitud plena frente a cualquier cosa o persona es la que conlleva tanto los aspectos libidinales (positivos) como agresivos (negativos). De esta manera, podemos decir que no existe algo ni totalmente bueno ni totalmente malo. Lo que tenemos son combinaciones de ambas que cambian con el tiempo. En consecuencia, el ejercicio del optimismo consiste en tratar de no caer en la tentación constante de ver únicamente lo malo. Es, como todo, un hábito: en la medida en que lo realicemos con mayor frecuencia y de manera constante nos será cada vez más fácil hacerlo. Finalmente, los que no pueden lograrlo, a pesar de su mejor esfuerzo, pueden beneficiarse de una psicoterapia psicoanalítica. Uno de los resultados que se tienen tras un proceso terapéutico es aprender, poco a poco, a fijarnos más en lo bueno y menos en lo malo. Esto hace que paulatinamente aprendamos a disfrutar más lo que tenemos y a sufrir menos por todo lo que, inevitablemente, nos hace falta. 

10 cosas que hacen feliz a un hombre


Conoce diez elementos que contribuyen a aumentar y perdurar la felicidad masculina. ¿Son los mismos que te hacen feliz a ti?

La revista Askmen encuestó a los lectores y les preguntó respecto a qué cosas les hacen feliz. Éstos son los resultados.

1. Amigos
Los amigos son lo que más felices hace a los hombres según Askmen.com. Con ellos se comparte, se ríe, se sufre, se discute y se celebra.

Con ellos gastamos dineros, pedimos dinero o debemos dinero. Conocidos hay muchos, pero amigos hay pocos.

2. Buena salud
Otro determinante de la felicidad es nuestra salud. Tener un cuerpo fuerte y una mente activa contribuyen a un estado positivo, mientras que lo contrario genera la sensación de miseria.

3. Una compañera positiva
Una de las claves para un buen matrimonio es encontrar una compañera positiva. La gente feliz tiende a casarse con otras personas felices y luego transferirse estados de ánimo positivos.

Por ejemplo, en el libro “Connected” los autores Nicholas Christakis y James Fowle descubrieron que no sólo las ideas nocivas, como obesidad o fealdad son “contagiosas”, sino también aquellas felices.

4. Amar el trabajo, independiente del sueldo
Hacer lo que nos gusta cada día. Sentirnos mejores profesionales, más íntegros y eficientes. Eso hace feliz a un hombre, sin duda, porque bien sabemos que “el dinero no compra la felicidad”.

Según expertos, estar en un trabajo que nos gusta puede producir, a intervalos, un estado de conciencia llamado flujo, un estado que equivale a la absorción absoluta de la actividad.

5. Trabajos voluntarios
Estar dispuesto a ayudar ha sido asociado positivamente a nuestra vida.

Para el doctor en sociología de Harvard, Robert Putnam, la gente que es miembro de organizaciones locales o clubes de ayuda son los más felices en América.

6. Matrimonio
Ha sido comprobado más allá de las dudas razonables: el nudo de la corbata del matrimonio es bueno para nosotros.

Para empezar, el matrimonio agrega años de vida saludable: un hombre casado tiene 9% menos riesgo de morir comparado con un soltero.

Los hombres casados también son significativamente más felices que los separados, viudos o divorciados.

Ojo: la mayor felicidad dicen ocurre durante el primer año de matrimonio.

7. Vivir cerca del trabajo
Esta conclusión viene de estudios sobre la tristeza, más que de aquellos sobre felicidad.

De acuerdo a los economistas suizos Bruno Frey y Alois Stutzer, el tiempo que gastamos en ir de casa al trabajo causa más estrés de lo que imaginamos.

Quienes trabajan lejos consideran que deben ser compensados salarialmente por ese gran trayecto.

Además, hay estudios que indican que los desplazamientos largos también afectan la felicidad de la familia del trabajador.

8. Ser joven y ser viejo
Como una ley de la vida, ser viejo o ser joven es muy importante para nuestra felicidad.

Hay fuerte evidencia alrededor del mundo respecto a que la felicidad tendría forma de U.

Comienza alta cuando somos jóvenes, luego cae cuando somos adolescentes, y el mínimo se registra a los 40 años. Luego, en la vejez se levanta a los niveles originales.

Lo mismo ocurre con la depresión: los mayores índices comienzan a mediados de los 40 años.

9. Sexo
Sí, es cierto. El sexo hace felices a los hombres.

Al respecto dos economistas del Reino Unido, David Blanchflower y Oswald Andrés, llevaron a cabo un estudio estadístico sobre la relación entre la felicidad de las personas y sus actividades sexuales en EU.

Encontraron que las personas que tienen relaciones sexuales de forma regular (es decir, cuatro o más veces a la semana) están en el grupo de los más felices de ese país.

Entonces, ¿el sexo hace más feliz a la gente o la gente más feliz tiene más relaciones sexuales? Seguro es una de las dos.

10. Queremos ser ricos

Queremos dinero, pero no es ésa la llave de la felicidad. Para los expertos es el ser más rico que cualquier otra persona que conozcamos. Suena cruel, pero ha sido científicamente probado.

De acuerdo a Robert Frank, profesor de Economía en Cornell, nos preocupamos más por lo que otra gente gana que lo que nosotros ganamos.

viernes, 12 de noviembre de 2010

Un mundo sin quejas



Si algo no te gusta, cámbialo. Si no puedes hacerlo, cambia tu actitud.
No te quejes ¡! Cambia la forma de ver las cosas y las cosas cambiaran de forma ¡!
Un Mundo Sin Quejas !¡ El Reto de los 21 días
En Julio del 2006 Will Bowen propuso a su comunidad “El reto de los 21 días” con el propósito de ayudar a eliminar cualquier rastro de queja o lamento y sus nocivas consecuencias para el individuo.
Su propuesta fue muy simple: Te colocas una pulsera morada con la leyenda UN MUNDO SIN QUEJAS y lo mantienes durante 21 días sin emitir ningún tipo de queja o crítica?; así sea “me duele la cabeza” o “nada me está saliendo bien”.
Si durante este periodo emites algún lamento, debes cambiar la pulsera de muñeca y volver a empezar. La mayoría de los participantes logró superar este reto, pero les tomó un mínimo de 5 meses, un tiempo que evidencia la presencia de la cultura de la queja en nuestras vidas.
Un reto que cambiará tu vida y la de tus semejantes
Ahora te estamos proponiendo asumir este reto de 21 días sin quejas, sin críticas y sin chismes… si lo logras, habrás hecho de tu vida un paraíso sin enfermedades. Tendrás mejor ánimo, menos dolores, relaciones más favorables, mayor autoestima, etc. Serás una persona más feliz y armoniosa.
¿Crees que puedes aceptar el reto?
Seis millones de personas ya lo han logrado desde 2006 cuando Will Bowen lanzó esta campaña en EEUU. Cada día se suman más personas para lograr un mundo mejor. México ya tiene una organización para apoyar “Un mundo sin quejas”
Muchas personas decían que no se quejaban demasiado, pero con el ejercicio se dieron cuenta que lo hacían unas 20 veces en promedio al día.
Quejarnos se ha convertido en una Pandemia
¿Has notado que siempre hay algo de que quejarse? El clima, el tránsito, la inseguridad en las calles, las mentiras de los políticos, la salud, el dinero que no alcanza, etc., etc. Lo único que ganamos con la QUEJA es sentirnos peor?
Nuestra propuesta es simple
ABANDONAS LA QUEJA Y, TE LLENAS DE GRATITUD.
… así que mantén una observación especial de tus pensamientos y palabras y cada vez que te descubras quejándote, expresa un agradecimiento a la vida, al trabajo, a la salud… o a cualquier cosa que puedas agradecer de corazón… siempre tendrás algo para agradecer. Cada vez que emitas una queja tendrás que volver a empezar la cuenta de los días desde uno.
Pensar una queja o crítica y no la digo, ¿También cuenta?
Por suerte NO. Sólo las palabras que salen de tu boca son las que cuentan en este caso.
Quienes lo han logrado reconocen que no es para nada fácil, pero después de las tres semanas, o más, que tardes en lograr la meta, dejas inclusive de criticar con la mente.
¡ Adelante !… acepta el reto… demuéstrate que SI puedes, y vive la GRATITUD como una experiencia que se “siente”… y asciende a un mayor nivel de conciencia y despertar, donde el panorama de la vida será más amplio y amable contigo.
No hace falta que te pongas una pulsera morada, utiliza una piedra en el bolsillo o algo sencillo. Lo importante es aprender a darnos cuenta que a veces nos quejamos. No hay que darle fuerza a esto, simplemente cambias la pulsera de brazo y YA. Lo importante es darnos cuenta, no culparnos. Y a comenzar de nuevo hasta llegar a los 21 días.
¿Por qué 21 días?
Los científicos dicen que toma 21 días crear un hábito. Nos tomará 21 días dejar el hábito de la queja y formar el nuevo habito de la GRATITUD.
“Quejarse no debe confundirse con la crítica constructiva a través de la cual le haces saber a alguien que ha cometido un error o que tiene alguna deficiencia de modo tal que pueda mejorar. Y abstenerse de quejarse no necesariamente significa soportar malas conductas o actitudes. No hay nada de malo en decirle al mesero que tu sopa está fría y que necesita ser calentada; si te ciñes a los hechos, que son siempre neutrales. -¿Cómo te atreves a darme la sopa fría?- Eso es quejarse”.
Excelente verdad?

Párate! 10 maneras de motivarte cuando te estás cayendo.


Incluso el más motivado de todos a veces puede sentirse desmotivado pero con algunos pasos, se puede empezar en el camino hacia un cambio positivo. Todos hemos tenido tropiezos y muchas veces pensamos que nos estamos cayendo pero no tiene porque ser así, párate!.
A veces no tienes ganas de hacer nada. He estado allí, y de hecho todavía me siento así de vez en cuando. No estás solo. Pero he aprendido algunas maneras de superarlo y te las voy a enseñar.
1. Crea una Meta. Siempre que he pasado por un bache (no sabía cómo llamarlo y se me ocurrió bache) o que siento que me estoy cayendo, he descubierto que a menudo es porque tengo demasiadas cosas en mi vida. Estoy tratando de hacer demasiado. Para hacer muchas cosas se necesita energía y motivación. Es probablemente el error más común que la gente hace: tratan de abarcar mucho, tratan de alcanzar muchos objetivos a la vez. No se puede mantener la energía y el enfoque (las dos cosas más importantes en el logro de un objetivo) si se está tratando de hacer dos metas al mismo tiempo. No es posible(o muy difícil) lo he intentado muchas veces. Tienes que elegir un objetivo, por ahora, y centrarte en el.
2. Encuentra la inspiración. Inspiración, para mí en muchos casos, viene de otros que han logrado lo que quiero lograr, o que están actualmente lográndolo. Puedes leer otros blogs, libros, revistas, leer historias de éxito. El Mundo del Éxito es un lugar para encontrar inspiración, no sólo de mí sino de muchos lectores que han logrado cosas asombrosas.
3. Emociónate. Esto suena obvio, pero la mayoría de la gente no piensa mucho en ello: si quieres salir de una depresión, se consigue entusiasmándote por una meta. ¿Pero cómo puedes hacer eso cuando no te sientes motivado? Bueno, empieza con la inspiración de los demás (ver arriba). Hay que considerar la emoción y construir sobre ella. Visualizar lo que sería tener el éxito ya (ver los beneficios de la meta en tu mente). Una vez que lo has hecho, sólo tienes que alcanzar ese rumbo de energía y mantenerla en funcionamiento.
4. Publica tu objetivo. Imprime tu meta en grandes palabras. Haz tu meta sólo unas pocas palabras de largo, como un mantra, y después pégalo en tu pared o el refrigerador. Ponlo en la casa y el trabajo. Colócalo en tu escritorio. Tú quieres recordarte de tu meta a menudo, para mantener tu enfoque y tu entusiasmo. Una foto de tu objetivo (como una modelo sexy con abdominales, por ejemplo) también ayuda. Piensa en ello todos los días. Si tú piensas acerca de tu meta todos los días, es mucho más probable que sea una realidad. Para ello, la publicación de la meta en la pared o de sobremesa (como se mencionó anteriormente) ayuda mucho.
5. Comprométete públicamente. A nadie le gusta quedar mal delante de los demás. Todas las personas van a ir la milla extra para hacer algo que han dicho públicamente. Coméntaselo a tus amigos, familiares y compañeros de trabajo. Busca apoyo de ellos también. Es difícil lograr algo solo.
6. Aférrate a la meta. Hagas lo que hagas, no te rindas. Incluso si tu no sientes ninguna motivación hoy, o esta semana, no te des por vencido. La motivación volverá. Piensa en tu meta como un largo viaje, y tu caída es sólo un pequeño bulto en el camino. Párate.
7. Comienza con algo pequeño. Realmente pequeño. Si está teniendo dificultades para iniciar la actividad, puede ser porque estás pensando en algo demasiado grande. Si quieres hacer ejercicios, por ejemplo, puedes pensar que tienes que hacer estos ejercicios intensos cinco días a la semana. No – en su lugar, haz pequeños, diminutos, pasos de bebé. Solo hacer 2 minutos de ejercicio. Yo sé, que suena ridículo. Pero funciona. Comprometerse a 2 minutos de ejercicio por una semana es muy fácil. Es posible que desees hacer más, pero sólo adhiérete a 2 minutos por ahora. Es muy fácil, no puedes fallar. Hazlo, al mismo tiempo, todos los días. Sólo un poco de abdominales, flexiones, y algo de trote. Una vez que has hecho 2 minutos al día durante una semana, aumenta a 5, en un mes, haces 15-20. ¿Quieres madrugar? No pienses en despertarte a las 5 am. En cambio, piensa en despertarte 10 minutos antes por una semana. Eso es todo. Poco a poco pero avanzando progresivamente.
8. Aprovecha los pequeños éxitos. Una vez más, si comienzas con pequeños pasos durante una semana, vas a tener éxito. No se puede fallar si se empiezas con algo ridículamente fácil. ¿Quién no puede hacer ejercicios durante 2 minutos? (Si usted es uno, me disculpo.) Te sentirás exitoso y bien contigo mismo. Toma esa sensación de éxito y comienza a construir sobre ella, con otro pequeño paso. Añadir 2-3 minutos a su rutina de ejercicios, por ejemplo. Con cada paso (y cada paso debe durar alrededor de una semana), se sentirá aún más éxito. Haz que cada paso sea exitoso, realmente pequeño, y no fallará. Después de un par de meses, tus pequeños pasos se suman a un gran progreso y un gran éxito.
9. Piensa en los beneficios, no en las dificultades. Un problema común es que pensamos en lo difícil que algo es. El Ejercicio suena tan duro! Sólo de pensarlo cansa. Pero en lugar de pensar en lo difícil que es algo, piensa en lo que vas a lograr. Por ejemplo, en vez de pensar acerca de cómo el ejercicio puede ser agotador, céntrate en lo bien que te sentirás cuando lo haces, y cómo vas a ser más saludable y más delgado en el largo plazo.
10. Agarra a los pensamientos negativos y sustitúyelos por otros positivos. En este sentido, es importante iniciar la supervisión de tus pensamientos. Reconocer el diálogo interno negativo, que es realmente lo que está causando tu caída. Trata de tener conocimiento de todo pensamiento negativo. Entonces, después de unos días, trata de aplastar esos pensamientos negativos como un insecto, y luego sustitúyelos por un pensamiento positivo correspondiente. “Esto es demasiado duro!” Y sustituirlo por: “Puedo hacer esto! Si ese hombre lo pudo hacer, yo también puedo! “Puede sonar cursi, pero funciona. En serio.

Dinámicas de Motivación: Valorar los buenos momentos en tu vida.



A menudo con las cosas que pasan a  nuestro alrededor olvidamos todo lo que realmente amamos y es importante;  muchas veces  dejamos que la inercia de los males de este mundo nos consuma por dentro. Sin embargo hay momentos únicos y especiales en la vida de cada individuo que nos reviven y nos recuerdan el papel valioso que tienen aquellas etapas que están llenas de vida. Por ello una dinámica de motivación para esos momentos de incertidumbre en tu vida, consiste en sencillamente escribir en un papel diez circunstancias o momentos que te hicieron muy feliz en tu vida.
A pesar de tratarse de un sencillo ejercicio que aparentemente no tiene mucha dificultad, en tu cabeza pondrás a trabajar numerosos recuerdos que son de impulso para que te animes a realizar cualquier proyecto y llevarlo con éxito.
Al realizar está Dinámica de Motivación notarás el esfuerzo que realiza tu mente al volver atrás y pretender escoger los momentos adecuados, hallarlos en tu mente y darle una valorización en tu vida al colocarlos sobre el papel, sencillamente se trata de  tomar algunos recuerdos que motiven, o te causen gracia, amor, etc.
Priorizar estos recuerdos en tu vida, es algo invaluable pero notarás que realmente por más pequeños que sean estos momentos, por más dificultades y obstáculos que haya habido en tu vida, nada impidió que te sacara una sonrisa o una lagrima de emoción;  son estos pequeños o grandes  momentos que te hacen o te levantan para seguir luchando, tienes que seguir valorizando y defendiendo cada uno de esos sentimientos que te hacen sentirte en la cima, por cierto nunca te olvides que dentro de ti todavía está el poder que te llevo a lograr eso y tener ese momento.
El agradecimiento, por otra parte es fundamental, al poner en el papel cada uno de estos momentos, ya que al plasmar en letras esa historia que vive dentro de ti, estas documentando un hecho que sin duda significa mucho en tu ser, y esto debes valorizarlo como único y especialmente  en lo que te realiza como persona .
Fundamentar porque cada uno de estos instantes fue o son algo importante, se trata de una meta que a veces no tiene explicación, muchas veces no te explicas exactamente por que es la alegría de ver sonreír a alguien que amas, o el sentimiento de alcanzar una meta, simplemente son momentos que no hay palabras que puedan explicar lo que para uno significan, pero es la sensación misma y la capacidad de lograr que ese estimulo cause dentro de tu vida un cambio que te permita superar con éxito cada puerta que abras con esperanza y certeza de que tus habilidades son capaces de lograr cada uno de tus objetivos teniendo siempre en tu respaldo estos momentos de mucho valor de soporte.
Este sencillo ejercicio puede ser realizado tanto individualmente como grupalmente (con tu familia, tu equipo de trabajo, etc.), además es de mucha conveniencia si se conserva la hoja y antes de precisar de alguna muletilla motivacional se retorne a ella.
Sin duda este ejercicio puede asimismo ser realizado con distintas temáticas, además de que es ampliamente recomendado actualizarlo de vez en cuando, siempre guardando el original pues a pesar de que pase mucho tiempo en tu vida, el vigor y la valentía en diversas etapas de tu vida no deben olvidarse, ya que cumplen la función de ser  fuentes de energía constante en cada paso que se realice a lo largo del camino de una vida colmada de éxitos. Realmente esta dinámica de motivación es sumamente poderosa, así que no dejes de utilizarla.

¿Quién Soy y Qué Estoy Haciendo?


Tu mundo interno controla tu mundo externo. Cuando tú hayas convencido a tu mundo interno de que tú eres excelente, tú automáticamente te convertirás en excelente. . Has tu tarea en el área interna, en privado. Afirma tus resultados. Has lo en el tiempo presente, tu mente subconsciente solamente puede ser programada en el tiempo presente.
Lo que tú piensas constantemente se convierte en tu realidad. Lo que tú piensas de esta manera se convierte en una creencia. Todas las creencias se convierten en una realidad. Tú eres en lo que tú crees, el lograr tu meta es un estado mental. El proceso es provisto por tu subconsciente, el sabe que hacer para lograr los resultados deseados. Tú subconsciente forma el plan para realizarlo y tu conciente lo ejecuta.
Una parte es el planificador y la otro el ejecutador. El pensador piensa y el hacedor hace. Tu trabajo primordial es definir la meta e imaginarte poseyéndola, entonces el ejecutador tomara el control y lo hará.
Tú puedes tener tantas cosas como tú puedas aceptar mentalmente. Si tú puedes verlo entonces tú puedes tenerlo, tú tienes que darte permiso para pensar en grande, tienes que permitirte a ti mismo expandir tus horizontes.
Si tu estas en ventas tienes que pensar en aceptación. Primero tu mismo aceptándote y luego tus clientes aceptándote. Siempre en ese orden. Cuando tú te aceptas, ellos te aceptan. Tu solamente serás aceptado si tu crees que eres.
Tu autoestima es el comienzo y el final de todo lo que tú eres y todo lo que serás. Expandir, reenforzar y agrandar tu autoestima puede ser una de las cosas más importantes que hagas en tu vida.
Tú siempre te quedaras con dos preguntas, quien soy y que estoy haciendo. Tú puedes afirmar las dos posiciones. Tu futuro depende de ello, una herramienta para lograrlo son las afirmaciones, no te olvides que tú creas tu propio destino. Hazlo ahora!!

Logrando tus Sueños y tus Metas

Motivación Personal


Lograr tus Sueños y tus Metas depende de diferentes factores:
1. Tú debes tener una meta específica.
2. Tú debes estar seguro de que quieres esa meta.
3. Tú necesitas crear una imagen mental de tu meta.
4. Tú necesitas un deseo muy fuerte.
5. Tú necesitas descartar todo pensamiento de duda y pensamientos de fracasos.
6. Muestra confianza y fe.
Persevera hasta que alcances el éxito!!
Cuantas personas llenan estos requisitos? Solo unos pocos. La mayoría de las personas no conocen que existen leyes que gobiernan el éxito y que deben ser seguidas.
Es muy fácil sonar y luego decir era simplemente un sueno y nunca se va a convertir en realidad. Es muy fácil renunciar debido a la falta de fe.
Lograr tus metas no debe ser extremadamente difícil. De hecho debe se divertido si lo haces de la manera correcta; no es el trabajo duro ni el físico el que trae el éxito. De hecho el éxito viene de trabajar inteligentemente y no físicamente.
Visualizar y repetir afirmaciones hace este trabajo mental y son pasos vitales para alcanzar EL EXITO. Cuando visualizas y afirmas te focalizas y canalizas tus energías hacia tu meta. Tu mente se dirige hacia encontrar las soluciones necesarias para manifestar esas metas.
Pensando de manera positiva hacia tu meta y no dejando que ninguna duda entre en tu mente, tu intuición comenzara a trabajar, comenzaras a ver las oportunidades y tendrás una energía increíble a tu disposición que te empujara hacia el logro de tus metas.
La atención, intención y energía canalizada a través de la visualización y las afirmaciones desarrolla tu fortaleza interna, concentración, poder y autodisciplina. Tú vas a activamente desarrollar tus poderes internos.
Otra de las ventajas de la visualización y las afirmaciones es las puedes usar en donde estés, en cualquier momento y sin la necesidad de ningún instrumento externo. Lo único que necesitas es tu mente.
El éxito aparece de muchas maneras, algunas veces maravillosamente o milagrosamente o quizás ordinariamente y muchas veces a través de la oportunidad que aparece. La puerta se abre cuando te levantas y tomas ventaja de la oportunidad.
Si sigues estos métodos correctamente estos te traerán mas ambición, inspiración y motivación lo cual te incrementara tus chances de alcanzar el éxito.
No te rindas nunca.
Exito!!